En el corazón de Londres un pequeño almacén, hace de su metodología una escuela en la que se aprende a prescindir de los vistosos envases.
Hay tiendas que se convierten en íconos. Algunas lo consiguen por su puesta vanguardista, otras se lo deben a la inmortalización que brindan el celuloide o los tabloides, muchas se transforman en lugares que capturan el alma de un barrio y se mantienen como clásicos meeting points o referentes. Y también están las que, sin grandes ambiciones, logran convertirse en verdaderas estrellas, tan sólo, por el corazón que ponen a todo lo que se puede encontrar en ellas.
UNPACKAGED, una pequeña tienda almacén en el centro de Londres, entra en esta categoría. Su novedoso concepto, concebido en 2006 por Catherine Conway, la convirtió en un referente del consumo inteligente y responsable en el rubro de los alimentos.
La idea inicial surgió a raíz de las propias preocupaciones ambientales de su propietaria. Éstas la llevaron a investigar los productos locales disponibles, que podía comercializar de una manera diferente en la que la “basura” casi no existiera. Empezaron con un pequeño stand en el mercado de frutas y vegetales y luego, gracias al boca a boca y el apoyo que recibieron por parte de los medios de comunicación y creadores de opinión como the guardian, the ecologist, y la BBC, se transformaron en una tienda consolidada. “Queremos que sea fácil para nuestros clientes hacer lo correcto para ellos y para el medioambiente”, por eso UNPACKAGED ha creado una cadena de proveedores y un sistema de funcionamiento interno que lo hacen posible.
El revolucionario concepto de ofrecer productos sin packaging, surge a raíz de un análisis profundo sobre la creciente cantidad de basura producida anualmente en el reino unido. Catherine decidió entonces, que podía colaborar sensiblemente anulando los envases plásticos y descartables de todos los alimentos que se comercializan en su local. De esta manera, la tienda funciona así: todos los clientes traen sus propios recipientes. Éstos son pesados vacíos, luego llenados y pesados otra vez. Esta técnica reduce además notablemente el costo final del producto, ya que, un gran porcentaje es tradicionalmente destinado al packaging.
En este cálido almacén atendido por sus dueños, la mayoría de los productos tienen certificación orgánica o proceden de granjas sostenibles y organizaciones sociales. Aquí se puede conseguir de todo, desde frutas, vegetales, semillas y condimentos; hasta artículos de limpieza biodegradables, repasadores, shampoos, jabones orgánicos y pastelería homemade.
Quienes compran aquí adoptan la filosofía de la tienda y transforman su manera de consumir para siempre. Una vez que se toma consciencia de lo costoso que es para el medio ambiente (y para nosotros mismos) cada envase descartable, prescindir de ellos se convierte en una experiencia liberadora que llena el alma. Por eso, desde BAMBOO te recomendamos que siempre reutilices tus envases y lleves tu propia bolsa. Es un pequeño esfuerzo, que significa mucho para el planeta.